En una situación nunca antes vista en Copa Davis, Cristian Garin sufrió una agresión de parte de Zizou Bergs cuando fue quebrado en el undécimo juego del tercer set en el cuarto punto de la serie de Copa Davis entre Chile y Bélgica en Hasselt.
De forma inaudita, el juez general de la serie, el polémico portugués Carlos Ramos, junto al juez de silla, el español Manuel Franco Ojea, no procedieron a descalificar al número uno local, sino que solamente darle un warning. Tras sufrir aquel fuerte golpe en el ojo, Garin no estaba en condiciones de seguir jugando, y ante la negativa del chileno, los jueces determinaron entregarle el triunfo a Bergs por 6-3 4-6 y 7-5, dándole la serie a Bélgica.
Garin, que quedó conmocionado en el piso tras el choque, terminó con náuseas tras recibir el golpe de hombro de Bergs en el ojo, y golpearse la cabeza contra el cemento de la cancha. No obstante, Carlos Ramos, en reiteradas ocasiones, se negó a ver las imágenes del golpe, a pesar de que Nicolás Jarry le entregó su teléfono para verlas.
El nacional, ante la negativa del juez portugués para proceder con la descalificación, le dijo a Ramos: "Échame a mí. No tienes los huevos para echarlo a él", mientras Ojea comenzó a darle warnings de atrasar el juego al chileno, los cuales terminaron con un juego de penalidad que le terminó dando la victoria a Bélgica.
El doctor Alejandro Orizola, médico del equipo de Copa Davis, indicó que "Cristian Garin recibió un fuerte golpe en el globo ocular, razón por la cual se cayó y golpeó en la cabeza. Esto le generó una inflamación, dificultades para ver, náuseas y fuerte dolor de cabeza, aunque en ningún momento perdió la conciencia. Cristian Garin no estaba en condiciones de seguir jugando".
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